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Esto es porque le toca renovar su contrato de exclusividad que firmó en el 2020 por unos $100 millones. La palabra mágica en la frase anterior es “exclusividad” porque aparentemente en el nuevo contrato no habrá tal cosa. Joe va a poder subir su podcast a otras plataformas como Youtube, Google y Apple; todas competencia directa a Spotify.
La pregunta que se hace Spotify es si perder a Rogan sale más caro que $250 millones. Sí los pierde porque muchos no pagan Spotify, pagan una Joe Rogan Experience Subscription, entonces es una comisión más que otra vaina. Spotify despidió a un mierdero de gente (1500 puestos de trabajo, un 17%) y ahora van y se gastan un cuarto de millón de dólares en un solo carajo que el día de mañana puede tener un brote psicótico luego de meterse DMT o morirse de un infarto por más que Joe sea un auténtico fenómeno, a tal punto que Cristian Caroli le dedicó una salsa secreta.
Sin embargo, es demasiado dinero. No porque él no los produzca sino que honestamente no hay alternativa. Spotify ha sido absolutamente incompetente con la inversión dedicada a producir un ecosistema de entretenimiento.
25$ Millones a los Obama.
20$ Millones a Harry y Meghan.
Un carajo que fue presidente del país con el ejército más poderoso de la historia de la humanidad no pudo sacar un podcast exitoso (inesperado) y un par de becerros que no han trabajado un día honestos en su vida tampoco pudieron (esperado).
Hacer un podcast es fácil. Es fácil comparado con esto,
La idea de sentarse a literalmente hablar paja por un par de horas a la semana y vivir de eso es un sueño. El problema es que para estas celebridades ese “vivir de eso” es carísimo. Barack Obama tiene cosas más lucrativas que hacer que sentarse a hablar con celebridades y seguramente muchas facturas que pagar.
Hay un lente sobre el cual a Spotify le sigue saliendo barato el Rogan: no existe un solo músico capaz de producir 6 horas de música de alta calidad a la semana. El usuario premium promedio que escucha Rogan debe tener una fidelidad y consistencia en la plataforma altísima comparado con cualquier otro perfil. Sin Rogan, Spotify tiene que competir con cualquier otro disco duro gigante lleno de canciones a $10 por mes. Habrá que ver todos los detalles del contrato final, porque en mi opinión esto es algo que se puede perder si publica en otros sitios.
Hay 2 cosas que son ciertas
La barrera de entrada para hacer un podcast es bajísima y solo seguirá bajando. Hoy puedes grabarte con tu teléfono, limpiar el audio para tener calidad profesional, subirlo a Spotify y tienes tu propio programa de radio disponible en todo el planeta sin gastar un centavo extra.
La barrera de entrada para conseguir una audiencia es altísima y solo seguirá subiendo. Joe Rogan saca unas 6 horas de contenido a la semana. Sacar un podcast es como escribir una novela de fantasía, tu audiencia tiene que preguntarse por qué leerte a ti y no a Tolkien o Brandon Sanderson. No solo eso, cuando Joe Rogan empezó ya era una estrella. Había tenido un rol secundario en Newsradio (palo de serie, btw), comentador de la UFC y anfitrión de Fear Factor. Era famoso, y la tracción inicial que eso le puede dar a un medio es incuestionable. Tenía la energía para hacer que el cohete saliera de órbita, ya luego la trayectoria de la nave dependería del piloto.
El mercado es una carrera de resistencia y popularidad. Y como cualquier jerarquía, el 1% se va a quedar con 99% del dinero y la audiencia. Pero todo depende de tu objetivo.
Si tu objetivo es tener tu proyecto divulgativo para conseguir una que otra entrada de cine, un descuento, coger, o hablar un rato con tus panas, tú puedes lograrlo. No te rindas. Si tu objetivo es ganar un millón de dólares, es posible que simplemente no vivas en un país en el que la gente esté dispuesta a darte cinco dólares en lugar de diez a HBO, lol. Es normal que luego de la absurda devaluación del entretenimiento nuestros shows de Internet no parezcan valer la pena. Un blu ray con las seis temporadas de Los Sopranos son 100 euros,
Antes si querías ver los Sopranos a tu antojo te tenías que gastar eso. Ahora por 10 dólares puedes ver The Sopranos, Oz, Game of Thrones, Rome, Six Feet Under y Succession. Me encantaría poder competir, pero no puc més.
Que Joe Rogan se embolse un cuarto de millón de dólares no significa que hay real para todo el mundo, sino que la carrera hasta el fondo llegó al fondo. Si él solo se lleva $250M es porque es mejor estrategia que darle $25M a 10 shows, o $1M a 250.
The Masculine Urge to Podcast
El 2024 va a ver un colapso de los podcasts porque ha habido un colapso de la cantidad de dinero disponible para hacer publicidad producto de un colapso de la economía. El que tenga un podcast es porque es exitoso o porque le nace. Las celebridades ya no podrán inventarse una tertulia para ver si pueden monetizar un poco más a sus fanáticos y convertirlos en minutos escuchados.
Fuera de chinazo, ¿qué nos lleva a agarrar un micrófono? Me hago esa pregunta al leer reflexiones como esta,
Y creo que a veces los hombres tenemos conversaciones tan enriquecedoras que queremos compartirlas para hacer del mundo un lugar mejor y en última medida tomar el crédito, demostrar que nosotros también somos mejores. A veces lo hacemos con tanto ego que nos disociamos al punto de pensar que entrevistar al arquitecto de una invasión sanguinaria puede ser productivo y algo distinto a propaganda rusa. ¿Qué más quieres escuchar que no puedas ver con tus propios ojos, Lex? ¿De verdad los hombres somos tan egocéntricos para pensar que un dictador que lleva décadas aferrado al poder, asesinando a su oposición y controlando a las masas va a dar un tropezón en su propia casa yéndose de boca hablando con Tucker Carlson, el cuñado de América? Hay que ser bien pendejo. Si Tucker no fuera algo más que una oportunidad para Putin, no tendría permitido estar ahí. Y si fuera una amenaza, estaría en peligro.
Igual no todo es ego. Cuando un podcast tiene un gran mensaje, vemos los números y nos conseguimos que hay una audiencia que quiere escuchar, quiere mejorarse un poco. Hay muchos hombres que quieren sentirse un poco más acompañados porque se sienten solos. Si se merecen estar solos o no, ya no voy a hacer un juicio de valor al respecto, pero solos están. El podcast ofrece una intimidad y camaradería que nunca va a haber en el show de Jimmy Fallon frente a una audiencia y un escritorio de por medio.
Honestamente, creo que esa es la gran diferencia de mercado y por la que hay muchos más podcasts de hombres que de mujeres. Las mujeres crecen compitiendo, sufriendo por alcanzar estándares de belleza inalcanzables y francamente más bien están cansadas tener que oír estupideces. Si acaso están mamadas de escuchar a todo el mundo dar su opinión sobre qué hacer con su vida. Cuando eres un hombre, se espera que descifres muchas cosas por tu cuenta y eso se hace muy complicado cuando creces si un padre que te eche una mano y te aconseje. Suena casi freudiano, pero muchos hombres buscan en un podcast lo que nunca tuvieron de sus padres y hermanos.
Varias veces he tenido la suerte que alguien se me acerca por agradecerme por uno que otro episodio. Es una experiencia que me genera mucha humildad y agradecimiento. Me duele un poco pensar que dije algo que nadie había dicho, porque mucho de lo que digo es bastante barato. No soy un antropólogo, filósofo o un historiador rodeado de pergaminos. Aprecio mucho esos gestos, y si bien no se compara con $250 millones de dólares, a veces eso es pago suficiente y la razón por la que tengo mi pequeño programa de televisión.
Una Bulla
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