Se veía mejor
Se veía mejor
Hoy analizamos un poco el mundo de los videojuegos y los gráficos en CRT.
En un mundo de remasters y fidelidad gráfica se nos olvida que la tecnología en la que vemos las cosas no siempre era la misma y los artistas hicieron los mejor posible no SOLO CON los píxeles que tenían sino PARA los píxeles que tenían.
Acá una imagen de Ryu en Street Fighter 2 en un monitor CRT.
No es nostalgia, esto es lo mejor que puede verse esta ilustración si cada pixel es de ese tamaño y con esa anatomía. Una imagen que sale siempre que se habla del tema es esta comparación de Castlevania.
Lo digo sin pelos en la lengua que cualquier remaster tiene dos opciones:
Aplicar un filtro que imite la tecnología de display target.
Cambiar la dirección de arte a la fidelidad adecuada de los estándares modernos.
Adicionalmente, creo que el pixel art le cuesta existir dentro del espacio de fidelidad 4K en el que vivimos hoy en día porque los píxeles poco a poco están dejando de existir de la misma forma que nunca existieron en las fotografías analógicas o en cine. Sí, aún hay píxeles de la misma forma que hay bits en mi disco duro, pero no una unidad sobra la que gira la fidelidad visual.
Hay una multitud de juegos con un pixel art hermoso, pero algo que tienen en común es que cada uno de sus píxeles es absolutamente artificial y son un concepto más matemático y de computación gráfica que electrónico.
Celeste.
Dead Cells.
Hotline Miami.
¿Qué tienen en común estos juegos? Además de ser buenísimos, son juegos pixel art, pero son juegos modernos con un diseño retro. ¿Podrían existir o ser divertidos sin ser en pixel art? No. No serían el mismo juego. Dejarían de ser subversivos, perderían su identidad y serían menos especiales.
Esto puede que no lo parezca, pero es un tema delicado y una de las consecuencias de una sociedad capitalista. Estos juegos son una paradoja porque la tecnología en la que funcionan y lo que aspiran ser sería imposible en las plataformas que referencian. Hay juegos para los que 8 bits eran suficiente, pero hoy en día requiere esfuerzo alcanzar esa suficiencia tecnológica.
Hagamos una pausa y hablemos de guitarras.
La mejor guitarra en el mundo puede que ya fue creada y habrá quien te diga que es la Fender Stratocaster. Yo no soy músico, pero esta guitarra creada en 1954 sigue sonando hoy en día y cualquier músico te dirá con el corazón en la mano que un buen luthier puede convertir una guitarra con +30 años en una guitarra nueva. Tanto así que es un problema para las empresas de guitarras que no tienen un motivo real para seguir produciéndolas y la mayor parte de su mercado son guitarras de principiantes. Básicamente la mejor guitarra que existe no es la que salió este año sino que la puedes conseguir de segunda mano.
El mismo lente se puede usar para los juegos. El mejor JRPG puede que haya salido si tu definición de JRPG omite vanguardia gráfica. Muchos dicen esto de Chrono Trigger, un juego de 1995 al que le han hecho muchos remasters pero se han olvidado que el juego no solo es bueno por lo que es sino que es bueno porque su dirección de arte estaba apuntando a la fidelidad de imagen de sus tiempos. Acá una comparación del remaster con CRT y sin CRT, cortesía de @crtpixels.
El pixel art es muy interesante porque en la imagen de la izquierda los píxeles son una decisión, pero en la derecha es algo con lo que el artista tuvo que lidiar.
Existen juegos que un port no es suficiente para traerlos a la vida. Mi ejemplo favorito es Metal Gear Solid, un juego que you had to be there. Hoy en día casi parece una parodia, pero en su momento estaba décadas luz más allá de cualquier cosa en la industria.
Hoy en día los juegos AAA no están diseñados desde ninguna perspectiva para ser jugados en un tv pequeño en tu cuarto con las luces apagadas. Están diseñados para ser el espectáculo más grande posible y cuando llegue el próximo espectáculo más gigante van a inevitablemente empequeñecerse.
Hay unos cuantos juegos que creo que pueden soportar el paso del tiempo mejor que otros, pero para que sean verdaderamente eternos habrá que preservar y mantener vigente no solo lo que quería lograr, sino en dónde lo logró.