Chainsaw Man es un anime/manga maravilloso que mucha gente descarta por considerarlo demasiado unhinged, pero yo siento que es de lo más honesto que hay y una disección del shonen, que es por así decirlo el género Young Adult del manga y el arquetipo más popular del medio.
Shōnen o shōnen manga (少年漫画 shōnen manga) es una demografía de manga y anime, dirigida al público masculino joven.1 Su equivalente femenino es el shōjo.
A lo que voy, cuando eres un adolescente pelabola esta viñeta retrata gran parte de tu adolescencia.
No voy a negar que igual con 36 años de vez en cuando el sentimiento sale a la superficie pero no de la misma intensidad o con la misma desesperanza. Pero Chainsaw Man es honesto al mostrar la motivación de su personaje principal con total transparencia.
Eso por un lado, por el otro está esta página:
Yo recuerdo ser pobre. Tal vez no lo pareciera porque era blanco, pero éramos pobres. No que actualmente soy millonario ni mucho menos, pero siento que el mundo se ha abierto bastante gracias a las oportunidades que he aprovechado, la gente de la que me he rodeado y ponerle muchas horas a las cosas que espero que salgan bien. Pero de que era pobre era pobre.
Story time. Cuando entré en la universidad había un Subway, y yo nunca había comido en Subway porque era carísimo y solo era un sandwich. Si mal no recuerdo, un ticket de almuerzo en el comedor eran unos 150 bolívares, y un bocadillo de Subway eran creo que 15.000, o múltiples órdenes de magnitud más. La idea de comprarme una sola comida ahí me iba a dejar mamando para el resto del mes, en ciertos casos era todo el dinero del mes. Pero yo quería comer en Subway. Se veía rico, la gente que compraba ahí estaban bastante relajados, el local era limpio y entraba bastante a menudo porque como había refill yo agarraba un vaso de la basura para rellenarlo de cocacola y beber gratis. En retrospectiva creo que los que atendían tenían muy claro que no había comprado NUNCA ahí pero les daba igual si les robaba 500ml de refresco múltiples veces al día.
Decidí comenzar a trabajar y empecé a dar clases de matemática en casa de la mamá de una querida profesora llamada María Ángelica Villota, y fui uno de los primeros profesores de Reto's. Cobraba algo así como 5.000 bolívares la hora y si eran varios alumnos pues podía hacer hasta 25.000 bs/h que en ese momento era una fortuna para mí. Procedí a dar unas 3 horas de clases particulares cada día al salir de la universidad y hasta los findes. Para no quedarme atrás estudiaba hasta la 1am todos los días y luego me levantaba a las 6:30 para subir a la universidad de nuevo. Rinse and repeat. Con este dinero pude irme de vacaciones, comprar ropa, videojuegos, un televisor y eventualmente viajar a Barcelona de vacaciones.
Recuerdo con claridad estar caminando cerca de Subway y decidir comprar mi primer bocadillo. Fue un 30cm de pollo teriyaki. Hice la cola, le puse todo lo que creía que me gustaría y cuando le dí el primer mordisco fue delicioso. Lo pedí con refresco, así que por primera vez estaba bebiendo legalmente. Me dieron 2 tickets y una tarjeta para llenar y conseguir un combo gratis. Meses atrás para yo llenar ese cartón sería igual de fácil que conquistar todos los países de la Unión Europea militarmente, pero al terminar la universidad habría completado docenas.
Subway se volvió de mis lugares favoritos hasta que la crisis lo volvió mierda y primero desaparecieron ingredientes exóticos como cangrejo (que en realidad no es cangrejo, tho) y ya al final cuando llegabas a la cola parecía que te estuvieras haciendo un sandwich con lo que quedaba luego de una fiesta de cumpleaños de niño.
El bocadillo de 30 centímetros de teriyaki fue mi primer lujo y ha sido mi barómetro para medir cuanta mierda me haya comprado después desde un iPhome, una Mac o una moto. También he vivido cómo ha ido cambiando mi percepción de Subway frente a mis ojos, como en el 2009 cuando fui a una conferencia en New Orleans comí en Subway casi todos los días porque era baratísimo y Subway en USA es tan piedra que hubo literal un indigente que se metió al baño a fumar crack y el gerente lo tuvo que sacar casi a coñazos y yo en mi mesa así:
Hoy en día veo los precios de Subway y es de las opciones más baratas para comer fuera, y cuando estaba en oficina no existía un solo español que entendiera por qué alguien comería un bocadillo al medio día si esa mierda es para desayunar. Estoy bastante claro que el consenso general es que ningún Subway va a ganarse una estrella michelín.
No me identifico con Denji, pero lo entiendo. Yo también iba por la universidad diciendo coño, estaría bien coger y comprar algo para comer, pero cuando eres adolescente la verdad es que no se da. A mí me rebotaron TANTO en la universidad que a veces compartimentalizo eso y lo separo en dos problemas:
Ser un pelabola.
No tener autoestima para ser más transparente y dejar ir esas fijaciones que no van a ningún lado.
El género del shonen no es deshonesto (deshonensto gegege chistesitox). Para contar una historia hay un viaje externo, y una interno. El viaje interno puede estar lleno de pinceladas y con una exploración de la personalidad del protagonista y su relación con el mundo que lo rodea. Pero es liberador que de vez en cuando salga algo claro como el agua y su prota diga “quiero teta por favorrr”.
En fin, todo un mood.
Alto fan de Subway por aquí. Es nuestro sitio de almuerzo rápido favorito cuando agarramos un roadtrip.
Es más, el día que nos casamos (por City Hall, because COVID) fuimos a comer Subway después.
Esto me hizo recordar que en 2018 me iba a estudiar y a robar wifi a una sucursal de Starbucks cerca de casa. Me sentaba donde dejaban bandejas para que pensaran que había consumido y así no me echaban, una vez dejaron la mitad de un ponqué y me lo comí. Ahora todos los jueves nos pedimos café de Starbucks en la oficina. Esta overpriced btw...